Félix Díez es militante del PCE e IU
El día de ayer fue otro día en el que volvió a escenificarse de nuevo la falta de síntonía entre Frutos y Llamazares, aunque lo que realmente esconde este enfrentamiento es una lucha por mantener cuotas de poder en el partido por parte de los 2 dirigentes y sus acólitos y seguir viviendo de la política, aferrándose a la poltrona, sin dejar paso a las nuevas generaciones que son los que de verdad deben pilotar el cambio en IU y por extensión en la sociedad española.
El ex-coordinador general de IU, Julio Anguita, ya expuso en un documento presentado al comité federal del PCE y difundido ampliamente por los medios de comunicación de masas que la renovación en IU no debe limitarse simplemente a las caras ó a un cambio de estrategia política, sino que debe ser total y afectar a la forma de organización de IU para que logre ser un verdadero movimiento político y social como fue concebido en su fundación y tal y cómo reza en sus estatutos, y de esta manera canalizar las aspiraciones de una gran parte de la sociedad.
No podemos cerrar otro debate en falso en IU, estamos probablemente ante la última oportunidad para enderezar el rumbo y ponernos a trabajar al servicio del pueblo e involucrarle en nuesta causa, que es la suya propia, por eso esta asamblea es la más importante a la que la izquierda española se ha enfrentado a lo largo de su historia desde que existe, pues de salir mal puede significar su desaparición.
Según mi opinión que viene a coincidir con las opiniones de Anguita, Enrique Santiago y otros destacados dirigentes IU no debe aparecer ante la sociedad como la "muleta del PSOE", sino que debe presentarse con un perfil propio y un programa elaborado desde las bases contando con la participación de los movimientos sociales y así dar cabida a las demandas de los mismos.
El ex-coordinador general de IU, Julio Anguita, ya expuso en un documento presentado al comité federal del PCE y difundido ampliamente por los medios de comunicación de masas que la renovación en IU no debe limitarse simplemente a las caras ó a un cambio de estrategia política, sino que debe ser total y afectar a la forma de organización de IU para que logre ser un verdadero movimiento político y social como fue concebido en su fundación y tal y cómo reza en sus estatutos, y de esta manera canalizar las aspiraciones de una gran parte de la sociedad.
No podemos cerrar otro debate en falso en IU, estamos probablemente ante la última oportunidad para enderezar el rumbo y ponernos a trabajar al servicio del pueblo e involucrarle en nuesta causa, que es la suya propia, por eso esta asamblea es la más importante a la que la izquierda española se ha enfrentado a lo largo de su historia desde que existe, pues de salir mal puede significar su desaparición.
Según mi opinión que viene a coincidir con las opiniones de Anguita, Enrique Santiago y otros destacados dirigentes IU no debe aparecer ante la sociedad como la "muleta del PSOE", sino que debe presentarse con un perfil propio y un programa elaborado desde las bases contando con la participación de los movimientos sociales y así dar cabida a las demandas de los mismos.
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